La alopecia es una enfermedad muy extendida en nuestro país que provoca la caída del cabello afectando, en la mayoría de los casos, a la autoestima de hombres y mujeres. Esta problemática puede ser de diferentes tipos y, en este caso, vamos a profundizar en la alopecia cicatricial: ¿las conocías? ¡Te contamos todo lo que necesitas saber! 
¿Qué es la alopecia cicatricial?
¿Qué es lo que diferencia a las alopecias cicatriciales del resto? Como su nombre indica, las alopecias cicatriciales se caracterizan por la presencia de cicatrices en el cuero cabelludo lo que impide el crecimiento del pelo en la zona afectada. Esto puede deberse a lesiones o afectaciones provocadas por traumatismos o quemaduras, aunque también puede derivar de una enfermedad del cuero cabelludo.
Para determinar su origen es necesario acudir a un profesional que evalúe cada caso. No obstante, las alopecias cicatriciales pueden tener una apariencia lisa o, por el contrario, puede derivar en enrojecimiento de la zona afectada, ampollas de pus o variaciones en la pigmentación. 
¿Qué tipos de alopecias cicatriciales existen?
Dentro de las alopecias cicatriciales se pueden encontrar variaciones en función del su origen o causa. Es por ello que este tipo de enfermedad capilar se puede dividir en dos grandes grupos: las alopecias cicatriciales primarias y las alopecias cicatriciales secundarias.
Alopecias cicatriciales primarias
Este tipo de alopecia cicatricial se caracteriza por ser una enfermedad del cuero cabelludo la responsable de la falta de pelo. Ésta provoca lesiones irreversibles en la raíz, así como un tejido cicatricial, por lo que las unidades foliculares desaparecen definitivamente.
Las alopecias cicatriciales primarias pueden provocar distintos grados de la enfermedad entre las que destacan varias.
Alopecia frontal fibrosante
La alopecia frontal fibrosante afecta tanto a hombres como a mujeres y se manifiesta con la caída del pelo en las cejas, así como en el área de la frente dejando una especie de “diadema”. Con ello se forman cicatrices en las zonas donde no hay pelo, por eso se dice que es un tipo de alopecia cicatricial.
Liquen Plano Pilar
Se trata de una enfermedad de tipo inflamatorio que afecta directamente a las unidades foliculares. De esta forma se produce una inflamación alrededor de la raíz del cabello causando áreas sin pelo.
Lupus Discoide
El Lupus Discoide es una enfermedad autoinmune que se manifiesta como una erupción en el cuero cabelludo causando la pérdida del pelo. Esto se debe a que afecta directamente a los tejidos y células del mismo organismo.
Foliculitis decalvante
Su aparición es muy poco frecuente y suele estar más presente en hombres jóvenes. Los síntomas que derivan de la foliculitis decalvante son inflamación, escozor, picor y pústulas. 
Pseudopelada de Brocq
Es la menos frecuente. Se trata de una patología en la que aparecen parches alopécicos.
Esclerodermia
Es una enfermedad rara de origen autoinmune que puede provocar afectaciones en el cuero cabelludo.
Morfea
Se trata de una enfermedad que afecta específicamente a la piel aunque, en ocasiones, ataca también al cuero cabelludo.
Alopecias cicatriciales secundarias
Las alopecias cicatriciales secundarias son aquellas cuyo origen deriva de factores físicos, quien se sufre tricotilomanía tiende a arrancarse el pelo provocando alopecia cicatricial; de químicos o térmicos, cuando se da por quemaduras. En este sentido, este tipo de alopecias cicatriciales pueden devenir por traumatismos o por cirugías.
¿Tiene cura la alopecia cicatricial?
Las alopecias cicatriciales, como hemos comentado anteriormente, pueden ser de varios tipos por lo que su tratamiento y diagnóstico deben ser evaluados por un médico especialista.
Lo que sí podemos establecer es que en el caso de tratarse de una alopecia cicatricial provocada por quemadura, no existe una cura que revierta sus efectos. No obstante, lo que sí se puede hacer es mejorar la zona afectada cuando la alopecia esté en proceso de cicatrización mediante el Plasma Rico en Plaquetas u otras terapias biológicas. En este sentido, cuando existe una cicatriz el único posible tratamiento para poner fin a la falta de pelo es el trasplante capilar aunque el resultado del mismo no está garantizado al 100%, ya que el tejido de la cicatriz es fibrótico y no hay suficiente vascularización para garantizar la supervivencia de los injertos. Es por esto que es necesaria la evaluación por parte de un profesional que indique la mejor opción en cada caso.
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