Últimamente se ha hablado mucho de los champús sin compuestos químicos, y no es para menos. Comercializados como alternativas más ecológicas, amigables con el planeta y con nuestra salud capilar, cada vez son más las personas que se decantan por este tipo de productos capilares frente a los tradicionales.
Hoy precisamente queremos hablar de los mitos y leyendas detrás de estos champús. Sin dejar de lado el gran trabajo que muchas marcas realizan por buscar productos más sostenibles, también hay que tener en cuenta el efecto de un buen marketing sobre ciertos productos supuestamente mejores para nuestro pelo. Al final hay que equilibrar la balanza, buscando los productos que realmente funcionen y que son lo más sostenibles posibles.
Por esa razón, hoy vamos a hablar de todo lo que debes saber sobre lo que hay detrás de los champús sin compuestos químicos, así sobre los compuestos de origen químico que se han usado en champús capilares y que hay que evitar.
Todo esto te ayudará a encontrar el champú que mejor se adapte a tu pelo, buscando aquellas cualidades que puedan ayudarte de verdad a cuidar tu pelo.
Todo lo que debes saber sobre los champús sin compuestos químicos
Últimamente podemos encontrar una gran variedad de champús, cada uno de ellos anunciando sus bondades. Hoy queremos centrarnos en los champús sin compuestos químicos, teniendo en cuenta todos los beneficios que aportan, pero también sobre qué debemos fijarnos al optar por uno de estos champús. ¡Empecemos!
Champús de origen vegano
Vamos a comenzar con un primer detalle que debemos tener muy en cuenta a la hora de elegir champú: los champús de origen vegano. Como sabemos, el veganismo opta por no usar ningún tipo de producto de origen animal, de forma que podemos decir que son champús sin productos de origen animal en el mismo.
Eso sí, esto no significa que los productos sean ecológicos. Aunque suelen ir acompañados, son conceptos diferentes. Un champú elaborado sin ningún tipo de producto natural también puede ser vegano, precisamente porque no tiene ningún producto que proceda de animales.
Además, que sea vegano tampoco significa que sea cruelty free. Por tanto, si estamos buscando un producto vegano, ecológico y cruelty free, tenemos que fijarnos en que incluya todos estos puntos.
Productos sin petrolatos
Dentro de los champús sin compuestos químicos, algo que es interesante buscar es aquellos que no contengan petrolatos. Esto se debe a que el petrolato es un producto ampliamente utilizado en productos capilares, sobre todo por su bajo coste y porque aporta suavidad al cabello, manteniéndolo hidratado.
Aun así, estudios demuestran que su uso continuado provoca una obstrucción de los poros de la piel, haciendo que no pueda realizar la transpiración de forma natural y que no puedan eliminarse adecuadamente las toxinas.
Todo esto ha hecho que cada vez sean más las marcas que optan por no incluir petrolatos entre sus compuestos químicos utilizados.
Champús sin aceites minerales
Al igual que ocurre con el petrolato, es conveniente evitar aquellos champús que contengan ciertos aceites minerales que son derivados del petróleo. Un ejemplo de esto es el aceite de parafina.
Los aceites minerales tienen efectos similares al pretrolato, ya que sella el cabello y aporta sensación de suavidad, pero no es beneficioso su uso continuado.
Por esa razón, cada vez son más las marcas que optan por champú sin compuestos químicos que incluyan otros tipos de aceites frente a los derivados del petróleo.
Productos sin parabenos
Los parabenos son un tipo de compuesto utilizado como conservante y fungicida, y que cada vez se está dejando más de utilizar. Una de las cosas que más podemos observar entre los champús sin compuestos químicos es que no incluyen parabenos.
Esto se debe a que muchos estudios indican que su uso constante no es positivo, aunque actualmente están regulados y controlados.
Es importante diferenciar los parabenos de origen químico de aquellos de origen natural.
Champús sin formaldehído
Utilizado en ciertos productos capilares, como tintes y alisadores, y en esmaltes de uñas. Se recomienda evitar su uso en todo lo posible, buscando sustitutos más saludables. Esto se debe a que es un tóxico gastrointestinal y hepático, así como carcinógeno.
El formaldehído puede absorberse por la piel, pero también inhalarse cuando se calienta.
Todo esto hace que cada vez se utilicen más sustitutos naturales que tengan las mismas propiedades conservantes pero sin estos efectos secundarios. La vitamina E, así como algunos antioxidantes, se consideran buenos sustitutos.
Productos sin aceites sintéticos
Al igual que los aceites minerales, los aceites sintéticos son derivados del petróleo. Realmente no aportan ningún tipo de nutriente al cabello; lo único que hacen es cubrirlo y sellarlo, por lo que también hay muchos champús sin compuestos químicos que evitan su uso.
Champús sin propilenglicol
El propilenglicol es un humectante usado en muchos tipos de productos, incluido el champú. Aun así, cada vez se utiliza menos porque a largo plazo puede producir el efecto contrario y acabar resecando el cabello. En estos casos suele recomendarse el uso de un buen acondicionador.
Productos sin etanolamina
Dentro de los agentes alcalinos que se usan actualmente en el cabello, especialmente en tintes, la etanolamina es de los más seguros que podemos encontrar. Esto no significa que esté exento de efectos secundarios, ya que también puede llegar a provocar toxicidad. Aun así, dentro de todas las opciones, es la mejor por la que podemos optar si queremos teñir nuestro cabello.
¿Existen champús sin gluten?
Lo cierto es que en el mercado podemos encontrar algunos champús sin gluten, pero la verdad es que este “beneficio” tira más a la publicidad engañosa que a una utilidad en los champús sin compuestos químicos.
El gluten afecta a los celíacos al ingerir productos que lo contengan, pero no se absorbe por la piel. Por esa razón, mucha gente se ha quejado de que se incluya un “sin gluten” entre muchos cosméticos, descartando quizás la opción de los labiales.
Siendo sinceros, la verdad es que su utilidad es prácticamente nula, sobre todo porque de por sí la cantidad de gluten que puede encontrarse en un champú es muy baja, al igual que la probabilidad de producir algún tipo de reacción. Esto ha hecho que incluso champús que se vendían como “sin gluten” hayan tenido que ser retirados del mercado.
Champús sin aromas sintéticos
En el caso de los aromas sintéticos, no hay contraindicaciones que puedan diferenciarlo en exceso de los aromas naturales. Para saber si es natural y son champús sin compuestos químicos, tenemos que fijarnos en qué pone entre los ingredientes. Por ejemplo, si pone “extracto de naranja” lo más probable es que sea natural.
Productos sin talco
La cosmética capilar que no incluye talco es utilizada en los últimos años por muchos motivos, sobre todo porque tampoco se han indicado contraindicaciones. El talco es muy utilizado en las fibras capilares para mejorar el aspecto visual.
Champús antialérgenos
Algunos champús también buscan quitar de sus compuestos todos aquellos que puedan provocar alergia. En el caso de conocer la alergia a algún compuesto del champú, es conveniente buscar un champú que no contenga el compuesto en cuestión.
Productos sin sulfatos
Los sulfatos son utilizados para limpiar o acondicionar nuestro pelo. Actualmente hay muchos champús sin compuestos químicos que buscan cuidar de nuestra salud capilar evitando el uso de sulfatos. Este tipo de champús son más responsables con el medio ambiente, así como más beneficiosos para nuestro cabello y nuestra piel.
Champús cruelty free
Los productos cruelty free son aquellos que no han sido testados en animales. Tenemos que conocer la diferencia entre los champús cruelty free y los animal friendly. La principal diferencia es que los champús animal friendly son aquellos que no testean sus productos en animales vivos, mientras que los cruelty free no testean directamente en animales.
Otra diferencia que debemos tener en cuenta es que un champú cruelty free no tiene por qué ser vegano; puede ser cruelty free, pero con productos de origen animal como los lácteos.
Productos con activos de procedencia orgánica
En los champús sin compuestos químicos podemos encontrar aquellos catalogados como de procedencia orgánica. Para que un producto sea considerado de esta forma, tiene que usar materias primas que sean de origen natural, pero también deben de ser procesados sin ningún tipo de compuesto químico. Sólo así puede considerarse que es totalmente natural.
Champús sin colorantes
Dentro de los colorantes, tenemos que tener en cuenta los siguientes detalles: el colorante usado para dar color a los champús y demás productos no tiene por qué producir ningún tipo de reacción ni ser contraproducente. Simplemente es un colorante para dar tono al producto.
Además de esto, lo que sí tenemos que tener en cuenta son aquellos que se utilizan para la coloración de un producto. Dentro de estos, sí podemos encontrar algunos que pueden ser dañinos para el pelo; también hay opciones para dar color al pelo sin químicos, pero lo cierto es que no son tan duraderos actualmente como los nombrados anteriormente.
Productos sin alcoholes etílicos
Los alcoholes etílicos de por sí son orgánicos, normalmente iguales a los que podemos encontrar en las bebidas alcohólicas. No produce efectos secundarios ni irritación de manera habitual.
Champús sin siliconas
Las siliconas son uno de los productos que peor imagen tienen, y por eso existen tantos champús sin compuestos químicos que no incluyen siliconas.
Estos compuestos ayudan a sellar el cabello y aportar suavidad, y actualmente hay una gran disparidad de opiniones respecto a si es conveniente utilizar o no las siliconas en el pelo.
La importancia de la ciencia en el champú
En general, y como puede observarse, hay pros y contras de utilizar los champús con compuestos químicos, así como aquellos que no lo son. Hay muchas cosas que debemos de tener en cuenta a la hora de elegir un champú, y dentro de esto hay muchos detalles que deben de tenerse en cuenta, y ya no solo sobre su compuesto.
Para empezar, debemos de ser conscientes de que a veces por ser más natural no tiene por qué ser mejor. Si no nos decantaremos por un producto homeopático frente a un medicamento, ¿por qué considerar por completo que es más efectivo lo natural frente a lo estudiado durante años por profesionales del sector? Hay que equilibrar la balanza, siendo conscientes de que aquello totalmente natural no tiene por qué ser siempre lo más efectivo.
Esto no quita que a veces lo natural sea una de las mejores opciones para nuestro pelo, pero también debemos de ser conscientes que los remedios naturales no son siempre las opciones que nos van a ayudar en todos los aspectos.
La medicina y la ciencia han hecho que se avance notablemente en los cuidados capilares, haciendo que no haya que dejar de lado los avances que se están haciendo en el sector. Al final, tiene que haber un equilibrio entre ambos, de forma que tengamos la mejor opción para cuidar nuestro cabello.
Esto no quita que tengamos que buscar un consumo lo más responsable posible, que sea lo más amigable con el medio ambiente. En los productos, es un plus que sea responsable a nivel medioambiental, pero que también nos de las garantías para cuidar nuestro cabello.
En general, lo que debemos de buscar es un champú adaptado a nuestro cabello que sepa darnos lo que nuestro cabello necesita. En estos casos, acudir a especialistas en salud capilar siempre es una buena idea que nos ayudará a encontrar el mejor champú para nuestro pelo.
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