En la actualidad la calvicie afecta a una gran parte de la población tanto masculina como femenina. Tal es así que el Índice de alopecia en España es de un 42,60% según un estudio de 2011, esto quiere decir que somos el segundo país con mayor número de personas con problemas capilares, especialmente entre la población masculina. De la misma forma que se puede obtener el porcentaje de personas con calvicie de un país, es posible medir el grado de alopecia que padece un hombre a través de lo que se conoce como escala Hamilton-Norwood. Pero, ¿Qué es la escala Hamilton-Norwood de alopecia masculina? A continuación te contamos todo lo que debes saber sobre esta forma de medir la alopecia masculina.
¿Qué es la escala Hamilton-Norwood?
La escala Hamilton-Norwood, como hemos comentado anteriormente, es el método con el que es posible medir el grado de alopecia androgénica que padece un hombre. En el caso de la alopecia femenina, ésta se mide a través de la escala de Ludwig debido a que hombres y mujeres no presentan el mismo patrón de caída, por lo que se necesita de otro tipo de procedimiento para medirlo.
Gracias al uso de la escala Hamilton-Norwood es posible clasificar los distintos tipos de calvicie con el objetivo de personalizar los tratamientos capilares para cada uno de ellos.
¿Por qué se llama Hamilton-Norwood?
La escala que mide la alopecia masculina recibe el nombre de Hamilton-Norwood en honor a sus fundadores.
En primer lugar, James Hamilton fue la primera persona que se encargó de clasificar los distintos tipos de calvicie contribuyendo con la descripción de cinco estadios o grados evolutivos de la alopecia en el año 1951. Fue en el año 1975 cuando intervino Norwood para completar la clasificación previamente realizada con dos grados más logrando, así, una escala mucho más detallada de la alopecia androgenética. A partir de este momento, la clasificación de la calvicie en hombres bajo estos parámetros se convirtió en referencia obligada para los profesionales capilares.
¿Cuáles son los grados de la alopecia que recoge la escala Hamilton-Norwood?
La escala Hamilton-Norwood recoge un total de siete grados de alopecia androgénica los cuales responden al patrón de caída del pelo en hombres. A continuación te contamos en qué consiste cada estadio.
Grado I
Se corresponde con la primera etapa de la caída del pelo. Ésta consiste en el retroceso prácticamente inapreciable a simple vista en la parte frontal de la cabeza.
Grado II
En la segunda fase de la alopecia androgénica comienzan a apreciarse las llamadas entradas capilares, aunque el cabello de la zona frontal permanece intacta. Generalmente este grado puede prolongarse hasta pasados los 40.
Grado III
En el estadio III la afectada es la coronilla. De esta forma, se produce una pérdida de pelo progresiva en esa zona y, con el tiempo, se extiende. No obstante, un diagnóstico temprano con su correspondiente tratamiento puede frenar y evitar que la alopecia continúe avanzando.
Grado IV
Se produce un aumento de la pérdida de pelo en la zona frontal y de la coronilla. Además, se amplían las áreas sin pelo en los laterales por lo que la calvicie comienza a ser más visible pudiéndose observar una división del pelo entre las entradas y la coronilla.
Grado V
El grado V de la escala Hamilton-Norwood se caracteriza por el estrechamiento de la banda de pelo que separa las zonas despobladas de la coronilla y las entradas. La pérdida de pelo va en aumento y en la parte superior de la cabeza se conservan muy pocos cabellos.
Grado VI
En esta fase de la escala ya se habla de una alopecia severa. La zona afectada se ha vuelto mucho más amplia y, en consecuencia, ha desaparecido la separación que había entre las entradas y la coronilla. Es en este momento la calvicie se extiende hacia las áreas laterales de la cabeza y la nuca.
Grado VII
El grado VII en la escala Hamilton-Norwood se considera una alopecia generalizada. En esta fase únicamente queda una porción muy estrecha de cabello en la parte posterior de la cabeza, ubicada desde las orejas hasta la nuca.
Injerto capilar como solución definitiva a la falta de pelo
En la actualidad, el único tratamiento con el que podemos recuperar el pelo perdido es el injerto capilar. Gracias a la técnica FUE se puede injertar pelo en el área afectada por la calvicie extrayendo las unidades foliculares de la zona donante una a una. Éste es un proceso que, a diferencia de lo que ocurría con la técnica FUSS, no deja cicatriz visible logrando unos resultados más naturales.
¿Quieres recuperar tu pelo y estás pensando en hacerte un injerto capilar? ¡Pide tu cita de asesoría y diagnóstico gratuitos! Estaremos encantados de atenderte y resolver todas tus dudas.